Diario del Profe

Pedagogía y literatura

viernes, septiembre 26, 2008

¿QUÉ SE PUEDE HACER CUANDO SE LEE EL PERIÓDICO?

El periódico es una de las herramientas básicas para fomentar la lectura. Su inmediatez, las diferentes secciones, el material fotográfico, los avisos calsificados, y todos los demás componentes son de gran utilidad para ayudar a desarrollar los niveles de comprensión lectora en cualquier ciclo de la educación. Su uso implica una orientación del educador, especialmente, porque el periódico es algo que se está perdiendo como recurso estratégico para llevar a cabo la interdisciplinariedad en el aula y fuera de ella. Pero, así, con su formato físico, el de papel, el de la tinta, el de las cuatro columnas, como también el electrónico, debe ser un aporte, un apoyo de actualidad para todas las disciplinas.

En esta ocasión, tomo algunas de las ideas de mi libro Juegos comunicativos, estrategias para desarrollar la lectoescritura, con el fin de contribuir con ese quehacer didáctico, metodológico con un valioso intrumento de trabajo como lo es el periódico. Para tal fin, sugiero algunas acciones, empezando por la más sencilla: permita que el estudiante o la estudiante ojee, hojee, que lea lo que quiera del periódico, que se pregunte, que se detenga en donde desee, que no diga nada, que lo desordene,que haga lo que quiera con el periódico. Y..

1.sugiérale a los estudiantes que recorten títulares y con ellos formen oraciones, frases, párrafos. Es una forma entretenida de aprender, y puede fijarse si trabajan en forma individual o en equipo todos aquellos procesos mentales que se desarrollan en torno de la lectura y la escritura ( particularmente, la ortografía) con esta actividad.

2.sugiérales que recorten letras del mismo tamaño y con ellas formen chistes, trabalenguas, adivinanzas, anagramas, coplas, pensamientos, frases célebres, refranes, expresiones que los saquen de lo común, que les transformen la conciencia con la escritura, como lo afirma Walter Ong.

3.usted, apreciado (a) docente, léales en voz alta un artículo de interés; coméntelo, discútalo, ponga en práctica la mayéutica ( pedagogía de la pregunta), y provoque a los estudiantes para que ellos mismos propongan la lectura de otros artículos.

4.los avisos clasificados se deben leer como curiosidad y con una mirada objetiva: el mundo del mercado, de la oferta y la demanda, de lo escaso y lo abundante, de lo costoso y lo barato: cómo los avisos clasificados son un mercado de las pulgas y cómo el texto tiene brevedad, concisión, adecuación, coherencia; destáqueles, cuál es el valor de un aviso y por qué vale más un fin de semana.

5.desarrolle los niveles de comprensión lectora: sugiérale a los estudiantes que relacionen noticias de su país, su ciudad, con el mundo; cómo aquello que es local puede ser universal. De igual manera, que relacionen la noticia del periódico con la misma noticia televisiva o radial, cómo se diferencian los lenguajes, qué prima en cada medio.

6. es muy importante hacer con el periódico un banco de acontecimientos, noticias, sucesos, información interdiscplinar que permita ser abordado por todas las áreas. Otro asunto: el alumno debe sentar posición frente a una columna y su columnista, frente a la página editorial, frente a la posición ideológica del medio ante una situación local, nacional o internacional, frente a lo que es subliminal y el estudiante no lo identifica. Aquí vale la pena poner sobre la mesa varios periódicos y contrastar por qué para uno la primera página da relevancia a determinado asunto y otros lo minimizan. Palabras más, palabras menos, el periódico desarrolla a fondo el análisis.

En síntesis, hay muchas acciones para realizar; es necesario, por supuesto, que el periódico se vuelva una lectura permanente para fomentar la lectura y la escritura desde lo literal hasta lo crítico e intertextual con base en la interpretación, la argumentación y la proposición. Ábralo y mire qué disciplina no está incluida en él. Leámos todos el periódico, pues ésto nos da la categoría de lectores y escritores alfabetizados, parafraseando a Cassany.